Javier Gutiérrez encarna al segundo entrenador del Estudiantes, caído en desgracia tras ser detenido conduciendo borracho y colisionar con el propio vehículo de la policía local.
Su condena será entrenar durante tres meses a un grupo de diez jugadores que juegan en una liga de baloncesto a nivel nacional , compuesta por varios equipos de participantes con discapacidades intelectuales, que son elegidos en un casting de más de 600 personas en este film de Javier Fesser.
Interpretándose así mismos, estos diez jugadores con discapacidad intelectual, dan al traste, en este brillante film, con los prejuicios de los miles de espectadores que han tenido la suerte de verla.
Esta película que ha superado en las taquillas a otras superproducciones, describe de una manera cómica, tierna,y entrañable estas realidades, dando al traste con muchas ideas erróneas sobre las capacidades del día a día de personas, que tienen cualidades dignas de envidiar por todos aquellos que nos consideramos “normales”.
No queremos entrar en más detalles de este estreno español del año, que está protagonizado por un grupo que juega (más bien lo intentan) al baloncesto en un polideportivo de Vallecas.
La historia termina de manera insólita, que incluye “una preciosa referencia a Canarias y a nuestros plátanos”.
Deseándole que siga en esta línea ascendente de meritorios éxitos.
Es esta una de esas hitorias que desata en el espectador un cúmulo de emociones, y que bien merece la pena experimentarlas, siendo todas ellas con una finalidad positiva. Este film logra llevarte a reflexiones sobre un tema que desconocemos realmente en la mayoría de las ocasiones.